Más aerodinámico, más seguro, menos contaminante: el lanzamiento de un nuevo modelo de coche despierta generalmente interés, pero los franceses saben que esto ocurre continuamente. Así que hace falta algo más para atraer su curiosidad y conseguir que acudan al concesionario o a la empresa.
Contratar una animación es perfecto.
He aquí las 5 mejores que suelen ofrecerse, para bien o para mal.

El photocall es un acto clásico en el que las personas se fotografían delante de un fondo elegido. Por supuesto, puede ser una representación a tamaño real del vehículo o del logotipo del concesionario, con fines publicitarios. Estas fotos se envían a los asistentes como recuerdo. Sin embargo, a muchos franceses no les gusta que les hagan fotos y saben que también es una forma de recabar información sobre ellos, lo que puede echarles para atrás.

Vinculados directamente al mundo del automóvil, algunos artistas se empeñan en reproducir muy fielmente el vehículo en diversos soportes, aunque el hielo suele ser el más popular. Un juego de luces en un ambiente tenue puede hacer que esta animación sea muy agradable de ver. Pero está claro que al final no quedará nada de esta inversión.

Ofrecer un bufé libre y champán no es realmente un evento en el sentido estricto de la palabra, sobre todo porque puede atraer a gente que se contenta con la oportunidad de ser servida antes de marcharse, sin haber echado un vistazo al nuevo vehículo.

Como nueva tecnología, llevar un holograma para que los visitantes lo miren, lo recorran y luego vean el coche nuevo causa un gran impacto, sobre todo entre los visitantes más jóvenes. Pero una vez que lo han visto, pasan rápidamente a otras cosas. ¿Es ésta la mejor manera de presentar el vehículo?

Sin embargo, tanto para los niños que acompañan a sus padres como para los adultos, una actividad relacionada con el mundo del automóvil parece tener mucho éxito, tanto para los profesionales que la alquilan como para los que la prueban: los karts conectados.

Varias personas se suben cada una a un kart. El kart funciona con electricidad, lo que podría ser un interesante recordatorio de la apertura del mercado a los vehículos eléctricos, por un mundo más verde.

Un marcador registra el número de puntos obtenidos en función de los disparos efectuados y recibidos. Cada vehículo está equipado con un láser que puede utilizarse para disparar a otros vehículos.

Si tienes el mayor número de puntos, habrás ganado el juego al cruzar la línea de meta. Pero, por supuesto, mientras conduces por las curvas formadas por módulos hinchables, tienes que intentar esquivar los disparos de los demás, que están decididos a hacerse con la victoria y no dudarán en utilizar la rotación de 360° de sus karts para conseguirlo.

A partir de los 9 años es posible jugar en karts más pequeños, con la velocidad limitada si es necesario, para que todos puedan participar, incluidos los niños, que incluso pueden competir entre ellos, lo que hace que se lo pasen en grande.

La emoción del pilotaje, la destreza al volante, las risas... todo está ahí para que los participantes lo recuerden. Y, por qué no, puede que incluso descubran que conducir así les hará menos reacios a comprar un vehículo nuevo.